sábado, 31 de diciembre de 2011

Aborrecible inmediatez

La manecilla empezó a crepitar con extrañeza,
    de un momento a otro,  
los engranajes confabulados se fueron derritiendo.


Una voluntad extasiada
de contento supo
como desdeñar
el envejecimiento.............   --  Si sigo esta línea pronto perderé la noción de mis días.



El juego, brillante placer,
iba confeccionando
tejidos sonrientes perfectos.


De repente un atronador silbido paterno.


 _ De nuevo se delimitaba lo temporal,               
__ cruel idea del desgaste anímico que        
___ supo congelar la finita felicidad.


  ¡¡¡  Hijuee..... ya han sido las 2 de la tarde... debo terminar de vender las manzanas  !!!


Y no tuvo más tiempo para ser niño.

1 comentario:

Kuskunku Warmi dijo...

Realidad con nombre y apellido de miles de niñxs anónimos k a diario juegan a ser grandes entre coches y luces de la ciudad.....