lunes, 31 de enero de 2011

Mermado a pedazos

Una mesa sobrecalentada por el rozamiento del lápiz, su forma simétrica había resucitado tras disipar el sin fin de hojas reciclables que adornaban el sitio de desorden, y el viento vespertino hizo su trabajo desplazando las partículas de polvo. Materia sobre materia, espacios que resultaban aparentemente inútiles existían como si nada y a la par de los Libros Sabios.


Los colores se escondían y solo relucía el grisáceo andar de la mina de carbón 
que se había paseado por olvidadas páginas tras haber dejado inscrito su legado
en un papel arrugado.


Se anunciaba el abrir y cerrar, el hojear, paginear y el leer entre líneas del libro que rozaba sensualmente esa mina traviesa. Las páginas iban sucediéndose y vagamente despertaban interés, hasta la # 48. Era una carilla como todas, llena de grafías, línea tras otra, párrafos amontonados, pero sobresalía un encabezado ennegrecido y un tanto grande:

 

Visitaciones extaciantes







La vista no logró bajar y se estancó en la parte superior derecha, en una manchita cuyas aristas visibles señalaban el orden que debía seguir la lectura de la página.  Siendo el siguiente:

1°. Desde el título, de derecha a izquierda.


               2°. El quinto renglón, desde la penúltima palabra y a la izquierda.

3°. Desde la mitad del séptimo renglón y a la derecha.                

                                4°. La primera palabra diagonal al segundo renglón, en la otra carilla. 



Así es como se dibujó un hermoso mapa de seguimiento para hilar ideas, mas no fue seguido porque los sentidos se enfocaron en ese punto inicial, un muy inusitado centro que señalaba las direcciones con sus formas que habían sido de tejido vivo hasta la dolorosa opresión que las destrozó.


¡Sí, eso, había perecido entre las páginas!
Un zancudo apachurrado por las fibras de celulosa cuyas
entrañas se habían esparcido por la presión,  y que extraño,
una de sus alas yacía sobre la palabra personas. 

Sin duda alguna una visitación extaciante para mí, para la mina de carbón del lápiz, y ni que hablar para el pobre zancudo.



sábado, 15 de enero de 2011

X ¡¡


Y para abrir el año,..

Una idea que fusionó las mentes de dos hombres, fundadores de uno de los proyectos más ambiciosos en la historia del conocimiento de la humanidad.  Es posible que muchos no hayan oído hablar de ellos, (claro tal vez porque no son celebridades, ni  multimillonarios, y menos estrellas del "arte y la cultura").

Ciudadanos normales con intenciones extraordinarias e ideas claras y muy loables se plasmaron en uno de los sitios web más visitados en la actualidad, con una aceptación y cooperación multitudinaria alrededor del planeta, y basado siempre en la cooperatividad.

De nombres Jimmy Wales y Larry Sanger; internautas convencidos que en el 2001 dan inicio a la enciclopedia más grande con que ha contado la red, y por qué no la humanidad. Una iniciativa fundamentada en los principios del software libre, promoviendo licencias alternativas como las GPL, Copyleft y Creative Commons que ya a la fecha es todo un referente en cuanto a las citas de los trabajos estudiantiles.
Y lo más agradable de todo ello, es que puedo modificarla¡¡

Y pues nada menos que diez años cumple la gran Wikipedia, que naturalmente dió sus primeros pasos sin el mayor crédito ni grandes expectativas por parte de los conocedores de la web, mas Wales, confiaba en que el sitio ganaría fuerza al pasar de los años. Ahora la enciclopedia gratuita más grande que ha existido, cuenta con más de 17 millones de artículos editados por miles y miles de colaboradores voluntarios alrededor del mundo en 270 lenguas, y adivinen, incluso ya hay algunos artículos en kichwa¡



Si algún contenido tiene errores,,,,,,,,,,,,,,, Corrígelo...

Si algún contenido es algo insuficiente,,,,,,,,,,,,,, Mejóralo...

Si todavía no existe un contenido,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,, Créalo...


¡¡¡  Es tuya la decisión de ser Wikipedista. !!!